Creo que fue en el mes de marzo. Sí… Por aquel entonces, empezaba a acariciar la posibilidad de dedicarme a la genealogía. De repente, ocurrió algo, que yo interpreté como una señal.
Mi profesor de portugués propuso la lectura de una novela del autor angoleño José Eduardo Agualusa, titulada “El inventor de pasados”. El hecho de que el protagonista de la novela fuese un genealogista profesional, me pareció una hermosa casualidad. Esta historia se desarrolla en la Angola postcolonial. Una vez finalizada la guerra, el país se prepara para una nueva etapa. Las nuevas élites, deseosas de un pasado ilustre, demandan los servicios de genealogistas profesionales. Y así es como Félix Ventura, que así se llama nuestro genealogista, les proporciona un pasado nuevo. Dibuja su árbol genealógico. E incluso les ofrece como servicio complementario, fotografías de abuelos, bisabuelos y otros antepasados. Todo inventado.
En su tarjeta de visita se puede leer:
«Garantice a sus hijos un pasado mejor»
Mi intención como genealogista no es ofrecer un pasado inventado. Eso sería poco honesto por mi parte. Trabajo desde la seriedad y la profesionalidad, así que no invento o falsifico documentos. Sin embargo, me pregunto: ¿qué hay de realidad en una historia de vida contada en base a documentos y testimonios? Los documentos pueden mentir. De hecho lo hacen muchas veces. Y los testimonios también pueden ser sesgados. Ese familiar que era un santo para unos, puede ser un diablo para otros. En definitiva, la genealogía es una ciencia inexacta. Admite múltiples lecturas e interpretaciones, que dependen de nuestra mirada.
Como dice el poema de Campoamor:
“En este mundo traidor,
nada es verdad ni mentira
todo es según el color
del cristal con que se mira”
Maica
22.12.2015 at 12:23Mucho ánimo y suerte con esta construcción del pasado y del presente,
que harán un futuro, a lo mejor, diferente.
Ramón Enrique Álvarez Sánchez
12.09.2019 at 21:05Me encantaría la verdad
Martha Lucia Gallego
16.02.2023 at 23:41Interesante!
Desde que tengo uso de razón me pregunto de donde vengo… a donde voy pues e rodado tanto que ya no me importa más que La Paz interior y el bienestar de mis hijo.
Pero tengo esa espinita . El saber de mis ancestros.
Un cordial saludo.
bisagras
09.05.2023 at 15:15Si tienes esa espinita clavada, seguro que en algún momento lo harás…. Dar los pasos necesarios para saber un poco más.